Las industrias automotriz y metalúrgica están íntimamente relacionadas desde que en 1901 se fabricó el Curved Dash Oldsmobile, el primer vehículo producido en una cadena de montaje. Hoy en día, más de un siglo después, la fabricación metálica sigue siendo uno de los procesos troncales de la industria automotriz. De hecho, el aluminio y el acero se mantienen como los materiales más utilizados para fabricar vehículos, junto con el plástico en el caso de los interiores.
La industria automotriz utiliza diferentes tipos de fabricación metálica para la producción de piezas y componentes. Empresas de alta especialización como Bericht combinan las tecnologías más vanguardistas para producir piezas metálicas destinadas a este exigente sector, entre las que se encuentran componentes de carrocerías y chasis, sistemas de transmisión, componentes electrónicos, frenos, direcciones y suspensiones, piezas de climatización, ensamblajes y sujetadores, entre otras.
Fabricación metálica para la industria del autómovil
La fabricación de chapa metálica es un proceso ideal para producir paneles de carrocería, bisagras, rieles para los asientos e incluso las hebillas del cinturón de seguridad, entre muchos otros componentes. Se trata de uno de los procesos de fabricación más sencillos, y se emplea para la producción en serie de un gran volumen de piezas de metal. Este proceso utiliza maquinaria para manipular y cortar láminas de metal de forma automatizada, y ofrece numerosas ventajas. En él se pueden utilizar metales ligeros para producir componentes menos pesados que redundarán en la eficiencia del vehículo final. Por ejemplo, el aluminio y las aleaciones de acero de alta resistencia ofrecen unas propiedades de robustez notables pero sin repercutir en el peso.
Otra de las ventajas de este proceso es la durabilidad de sus componentes: las chapas de acero y aluminio elaboradas mediante fabricación metálica son robustas, aguantan el desgaste y la corrosión, y pueden mantener su integridad durante largos periodos de tiempo.
Desde el punto de vista aerodinámico, las actuales técnicas de fabricación metálica permiten realizar diseños complejos y vanguardistas que combinan funcionalidad y estética. Además, se trata de un proceso rentable que ofrece altos niveles de calidad y de precisión a bajo coste.
Este tipo de procesos utiliza diferentes materiales, en función de los objetivos y las piezas que se quieren producir. Los más utilizados son el aluminio y el acero, aunque también se emplean otros como el cobre y el latón, que son excelentes conductores térmicos y de electricidad. El aluminio es el más empleado por su ligereza, robustez y resistencia a la corrosión, y se suele utilizar para la fabricación de piezas de carrocería como capós y puertas. El acero, por su parte, es uno de los metales más resistentes y se utiliza para la fabricación de los componentes estructurales del vehículo, gracias a su capacidad para soportar impactos.
Estampación en caliente
Otra técnica de modelado de piezas metálicas es la estampación en caliente o hot stamping, que consiste en calentar una chapa de acero u otro metal a temperaturas cercanas a los 1.000oC para someterla a la acción de matrices refrigeradas y punzones, y a un proceso de enfriamiento que aumenta la dureza y la resistencia de las piezas.
Sin embargo, los automóviles cuentan con piezas que exigen mayor precisión y que requieren procesos más específicos de fabricación metálica, como el mecanizado. Esta técnica es precisa y especializada, y consiste en esculpir una pieza compacta de metal mediante tornos o herramientas de corte que eliminan el material sobrante hasta conseguir la pieza final. Este sistema puede producir formas y piezas muy complejas, y hacerlo con un nivel de tolerancia muy ajustado. El mecanizado se suele utilizar en el sector de la automoción pero también en otros ámbitos como la industria aeroespacial.
La soldadura es otro de los tipos de fabricación metálica que se utilizan con frecuencia en la industria automotriz, especialmente para fortalecer la unión de componentes estructurales como el chasis, los paneles de la carrocería y los sistemas de escape.
El knowhow de Bericht
El know-how acumulado por Bericht a lo largo de 30 años de actividad le ha situado en vanguardia en materia de fabricación metálica y le ha convertido en un partner confiable para cualquier proveedor o fabricante de componentes de automoción.
